El jengibre también conocido como kión, es un rizoma subterráneo que se caracteriza por su forma irregular y nudosa, con una piel fina de color marrón claro y una pulpa amarilla pálida. Su sabor es picante y ligeramente dulce, con un aroma intenso y especiado debido a su contenido en aceites esenciales como el gingerol y el shogaol.
Este ingrediente ha sido utilizado durante siglos en la gastronomía y la medicina tradicional de diversas culturas. En la cocina, se emplea tanto fresco como seco para aportar un toque vibrante a platos dulces y salados, desde currys y sopas hasta galletas y bebidas. En la medicina natural, se le atribuyen propiedades antiinflamatorias, digestivas y antioxidantes, siendo un remedio popular contra las náuseas y el malestar estomacal.
